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Diario de Avisos 21/01/2011

Nota de prensa publicada en el periódico Diario de avisos el viernes 21 de enero de 2011: “Cien años de siembra”.

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Diario de avisos - Viernes 21 de enero de 2011 - Página 17 "Cien años de siembra"

CIEN AÑOS DE SIEMBRA

Nicolás Soriano y Benítez de Lugo *

“Los que siembran entre lágrimas,
cantando van al segar” (Salmo).

Mañana sábado 22, en el colegio de San Ildefonso de Santa Cruz de Tenerife, se celebra el acto de clausura del centenario de la llegada a  nuestra isla de los Hermanos de La Salle. Como otros muchos ex alumnos  estaré allí para testimoniar con mi presencia el agradecimiento por la formación recibida en sus aulas.
Hace escasos días, desde el colegio Maravillas de Madrid, recibí una llamada en  mi casa del Hermano Feliciano, antiguo profesor del colegio Nava -La Salle de La Laguna (entonces jovencísimo, hoy con muchos años y mucha salud física y mental) para decirme que estará en dicho acto con otros ex profesores que a lo largo de su vida estuvieron en Tenerife.
Su voz trajo a mi memoria gratos recuerdos de mi infancia y adolescencia en los colegios Nava y San Ildefonso. De mi estancia en el colegio Nava hasta el ingreso en bachillerato, tuve en el Hermano Feliciano no sólo un profesor, sino un maestro, un maestro sabio y, por lo mismo, humilde: él me enseño y despertó en mí la curiosidad por aprender de los demás y de todo lo que nos rodea en la naturaleza. Recuerdo muy vivamente aquellos murales con colecciones de minerales, plantas, hojas, cereales, flores, etc. que cada uno tenía que buscar y confeccionar para luego exponer en la clase. Me enseñó a leer con la correcta entonación, caligrafía, ortografía, dibujo… pero sobre todo, me enseñó compromiso y generosidad.
Los principios y leyes de la física y de la naturaleza, los descubrimos haciendo trabajos manuales que fabricábamos nosotros mismos con simples y pequeñas cosas: una traba de la ropa, unos alambres, un tubo de ensayo, un cilindro de cartón, etc. Así aprendimos cómo funcionaba un circuito eléctrico, un anemómetro, una veleta, un electroimán, las sombras y los eclipses, un caleidoscopio… Fue un adelantado en la enseñanza de lo que hoy conocemos como pretecnología en la que era un maestro. ¡Qué forma tan sencilla y divertida de trasmitir conocimientos!
Sus muchos años de experiencia en la enseñanza de las Ciencias, los reflejó en un pequeño manual “La Pretecnología al servicio de las Ciencias” que publicó Ediciones Bruño en 1988 y que mereció  un altísimo reconocimiento por parte del Ministerio de Educación y Ciencias por su valiosa aportación pedagógica a la nueva materia que entonces se introducía en los planes de estudio.
En conjunción con la educación recibida en la casa y en la  familia, también nos enseño la fe (fides ex auditu) porque la fe entra por el oído y por el comportamiento ejemplar del que la trasmite. Yo, como muchos otros, me siento orgulloso y agradecido.
En el colegio aprendí las “virtudes cristianas” o, lo que es lo mismo, los valores humanos  universales (válidos para todos y en todas partes) e invariables.
El Cabildo de Tenerife y el Ayuntamiento de Santa Cruz han reconocido, con todo merecimiento, la labor del colegio de San Ildefonso a lo largo de estos cien años. Las instituciones públicas saben muy bien que, gracias en buena parte a este colegio y la enseñanza allí impartida y aprendida a lo largo de tantas generaciones, Canarias cuenta hoy con una impresionante pléyade de personas que ejercen su compromiso responsable con la sociedad civil en todos los ámbitos de la vida profesional privada y pública.
Es fácil imaginar que sin la existencia del colegio de San Ildefonso- se cuentan por miles los alumnos salidos de sus aulas- nuestra sociedad sería más pobre.
Con esta evocación de mi educación con los Hermanos de La Salle, personificada en el Hermano Feliciano, quiero expresar mi gratitud al colegio que puso los cimientos de mi formación posterior a lo largo de mi vida y mi homenaje a los profesores, muchos de ellos maestros, que por sus aulas han pasado.
Termino como el himno del colegio en honor a su patrón San Ildefonso (23 de enero):” Loor, Salud y Honor”.

* Ex alumno VII Promoción (1954-55)